Tienen que dejar su marca. No pueden solo mirar. No pueden apreciar. No pueden simplemente encajar en el orden natural. Tienen que hacer que algo antinatural suceda. Ese es el trabajo del científico, y ahora tenemos sociedades enteras que intentan ser científicas ... Hemos tenido cuatrocientos años de ciencia moderna, y ya deberíamos saber para qué es bueno y para qué no es bueno. Es hora de un cambio.
(They have to leave their mark. They can't just watch. They can't just appreciate. They can't just fit into the natural order. They have to make something unnatural happen. That is the scientist's job, and now we have whole societies that try to be scientific... We've had four hundred years of modern science, and we ought to know by now what it's good for, and what it's not good for. It's time for a change.)
En el "Parque Jurassic" de Michael Crichton, el autor enfatiza el papel activo de los científicos en la configuración del mundo que los rodea. En lugar de ser observadores pasivos, están impulsados a crear e innovar, a menudo empujando los límites de lo que es natural. Esta perspectiva destaca la necesidad de que los científicos dejen un impacto distinto en la sociedad al desafiar el orden existente y la realización de iniciativas audaces, ya que su trabajo no se trata simplemente de apreciación, sino de revolucionar el conocimiento y los procesos.
Crichton también critica los enfoques científicos adoptados en la sociedad moderna, lo que sugiere que después de cuatro siglos de avance científico, es crucial reconocer las limitaciones y las implicaciones éticas de los esfuerzos científicos. El llamado a un cambio apunta a la necesidad de reflexionar sobre las intenciones y consecuencias de las acciones científicas, instando a una reevaluación de lo que la ciencia debería priorizar. Esta narración fomenta un diálogo más amplio sobre el papel de la ciencia en nuestras vidas y las responsabilidades que conlleva tal poder.