Para consolar a Pippin sobre la traición de Gollum, Gandalf le recuerda que "un traidor puede traicionar a sí mismo y hacer el bien que no tenga la intención" {3.89}.
(To console Pippin about the treachery of Gollum, Gandalf reminds him that "a traitor may betray himself and do good that he does not intend" {3.89}.)
En la narrativa, Gandalf busca consolar a Pippin en medio de la agitación causada por la duplicidad de Gollum. Él enfatiza que incluso aquellos que pueden traicionar a otros aún pueden realizar buenas obras, independientemente de sus intenciones. Esto refleja un tema más profundo dentro de la historia, lo que sugiere que las complejidades de la moralidad a menudo conducen a resultados inesperados.
. Esta idea sirve para recordar a los lectores que, si bien la traición puede provocar dolor y desconfianza, también puede allanar el camino para la redención y los actos inesperados de amabilidad. La sabiduría de Gandalf destaca la naturaleza intrincada de las elecciones y consecuencias en el mundo que Tolkien ha creado, lo que sugiere una perspectiva esperanzadora sobre la falibilidad humana (o hobbit).