Solía ser, en los viejos tiempos, la imagen de los medios correspondía aproximadamente a la realidad. Pero ahora todo está revertido. La imagen de los medios es la realidad, y en comparación, la vida cotidiana parece carecer de emoción. Así que ahora la vida cotidiana es falsa, y la imagen de los medios es cierta. A veces miro alrededor de mi sala de estar, y lo más real en la habitación es la televisión. Es brillante y vívido, y el resto de mi vida se ve monótono. Así que apago la maldita cosa. Eso lo hace cada vez. Recuperar mi vida.
(Used to be - in the old days - the media image roughly corresponded to reality. But now it's all reversed. The media image is the reality, and by comparison day-to-day life seems to lack excitement. So now day-to-day life is false, and the media image is true. Sometimes I look around my living room, and the most real thing in the room is the television. It's bright and vivid, and the rest of my life looks drab. So I turn the damn thing off. That does it every time. Get my life back.)
En el pasado, la representación de los eventos y la vida en los medios de comunicación fue un reflejo de la realidad real. Sin embargo, el estado actual ha volteado este concepto; Ahora, la representación de la vida de los medios da forma a lo que muchos perciben como realidad. Este cambio crea una disonancia en la que las experiencias cotidianas se sienten monótonas en comparación con la vívida emoción presentada en las pantallas, lo que lleva a una situación en la que la vida se siente irreal, mientras que las proyecciones de los medios se aceptan como verdaderas.
Como el autor Michael Crichton ilustra en "fuselaje", esta desconexión puede conducir a una sensación de desilusión. El brillo de la televisión puede eclipsar los aspectos mundanos de la existencia cotidiana, haciendo que el mundo real parezca aburrido. Para recuperar un sentido de realidad y autenticidad en la vida, uno puede optar por desconectarse de esta influencia de los medios, lo que permite una reconexión con verdaderas experiencias y emociones.
