Los estadounidenses parecemos saber todo sobre las últimas veinticuatro horas, pero muy poco de los últimos sesenta siglos o los últimos sesenta años.4
(We Americans seem to know everything about the last twenty-four hours but very little of the last sixty centuries or the last sixty years.4)
En el "divertido de Neil Postman a la muerte", critica el estado del discurso estadounidense, destacando una tendencia preocupante donde la sociedad contemporánea se centra predominantemente en eventos inmediatos en lugar de una perspectiva histórica. Argumenta que si bien las personas están inundadas con información sobre acontecimientos recientes, su comprensión de contextos históricos significativos de siglos o incluso hace décadas es notablemente limitada. Este desequilibrio en el conocimiento puede conducir a una comprensión superficial de temas sociales y políticos importantes.
Postman enfatiza los peligros de esta preocupación con el presente, lo que sugiere que fomenta una cultura más interesada en el entretenimiento que en un discurso público serio. Su afirmación refleja una preocupación más amplia de que sin una base en la historia, los ciudadanos pueden carecer del pensamiento crítico necesario para participar significativamente en los eventos actuales, lo que lleva a un ciclo peligroso de ignorancia y desconexión del proceso democrático.