En el "Domingo de Ramos" de Kurt Vonnegut Jr., un personaje expresa una visión cínica de la ciudad de Nueva York, lo que sugiere que sus habitantes han perdido su creencia en el concepto de inocencia. Esta perspectiva refleja un tema más amplio de escepticismo que impregna la vida urbana, donde las duras realidades y complejidades de la existencia eclipsan la posibilidad de pureza o ingenuidad.
El intercambio destaca una profunda sensación de desilusión, lo que implica que el ambiente acelerado y a menudo duro de Nueva York da forma a las percepciones de su gente. Este sentimiento resuena con la idea de que la vida urbana puede eliminar el idealismo, dejando a las personas que lidian con los aspectos más hastiados de la experiencia humana.