Te llevas a un lugar donde no te queda absolutamente nada y luego descubres que tienes que esforzarte un paso más. Es un lugar difícil para estar.
(You take yourself to a place where you've got absolutely nothing left and then you find out you have to push yourself one more step. That's a tough place to be in.)
Esta cita destaca la inmensa fuerza que se requiere para perseverar cuando todo parece perdido. Superar momentos de completo agotamiento o desesperación pone a prueba nuestra resiliencia y fortaleza mental. Nos recuerda que el crecimiento a menudo ocurre más allá de nuestra zona de confort, en esos momentos desafiantes en los que rendirse parece una opción. Aceptar tales dificultades puede conducir al autodescubrimiento y a una nueva fortaleza, lo que en última instancia moldea nuestro carácter y nuestra capacidad para superar dificultades futuras.
