En la trilogía de Naguib Mahfouz en El Cairo, el autor explora la tensión entre las experiencias emocionales y las rutinas de la vida cotidiana. Sugiere que cuando las alegrías del corazón y el cuerpo se enredan con las acciones habituales, pueden conducir a una especie de tragedia. Esto implica que un estilo de vida repetitivo puede aburrir sentimientos genuinos y disminuir la conciencia de la profundidad espiritual y emocional.
Mahfouz enfatiza la idea de que los comportamientos habituales pueden eclipsar las verdaderas conexiones emocionales, transformando las experiencias una vez vívidas en simples recuerdos. La referencia a una "oración verbal" apunta al potencial de estos hábitos para servir como una expresión superficial de espiritualidad, sin autenticidad y compromiso consciente. En última instancia, este comentario refleja las complejidades de las emociones humanas y los riesgos de separarse de las experiencias sinceras.