Como el sentimentalismo hacia los animales puede ser excesivo, también puede hacer un verdadero realismo, ver solo las cosas que queremos en los animales y no los animales mismos.
(As sentimentality towards animals can be overindulged, so, too, can grim realism, seeing only the things we want in animals and not the animals themselves.)
En "Dominion", Matthew Scully explora la compleja relación entre humanos y animales, advirtiendo contra dos extremos: sentimentalismo excesivo y realismo duro. Sugiere que si bien es fácil volverse demasiado sentimental sobre los animales, también existe el peligro de verlos únicamente a través de una lente sombría y utilitaria. Esta perspectiva miope puede conducir a una falla para apreciar la verdadera naturaleza de los animales, reduciéndolos a simples símbolos de nuestros deseos o miedos.
Scully enfatiza la importancia de reconocer a los animales por lo que realmente son, en lugar de imponer nuestras propias narraciones a su existencia. Al abogar por una visión equilibrada, alienta a los lectores a interactuar con los animales en un nivel más profundo, fomentando la empatía mientras también entiende su valor inherente. Esta perspectiva requiere un enfoque más compasivo e informado de nuestras interacciones con el reino animal.