La cita refleja un humor negro o un sentimiento siniestro con respecto a un personaje con un comportamiento inaccesible o una presencia preocupante. Sugiere que el individuo es tan despreciado o premonitorio que contemplar la violencia contra él podría parecer un pensamiento común entre los que lo encuentran. Esto ilustra el fuerte impacto que tiene el personaje en quienes lo rodean, evocando sentimientos de animosidad o miedo.
Esta perspectiva sirve para construir una narrativa intrigante en "cada última caída" de Charlie Huston, destacando cómo se perciben los personajes de manera marcada e intensa. El autor emplea imágenes tan vívidas para involucrar a los lectores, atrayendo más profundamente en el panorama psicológico de sus personajes y la dinámica de sus interacciones dentro de la historia.