En el libro "Half Broke Horses" de Jeannette Walls, el tema de la fuerza y ​​la perseverancia se destaca a través de la perspectiva del protagonista sobre la sumisión. El personaje equivale a someterse a la rendición, sintiendo que es similar a renunciar a los esfuerzos de uno para superar los desafíos. Creen que si Dios nos ha dotado la capacidad y el coraje para mejorar nuestras circunstancias, entonces es esencial usar esa fuerza para luchar por nuestras vidas y bienestar.

Esta reflexión sugiere un profundo conflicto entre el deseo de persistir y la noción de ceder a las dificultades. La creencia de que Dios desea que nos esforzemos activamente por nuestro propio éxito refuerza la idea de que no debemos simplemente aceptar nuestro destino, sino que, en su lugar, introducimos el esfuerzo para dar forma a nuestros propios destinos. Esta perspectiva fomenta un enfoque proactivo de las luchas de la vida, enfatizando la importancia de la resiliencia y la determinación para enfrentar las dificultades.