Todos los que nacen siempre están muriendo.
(All who are born are always dying.)
La cita "Todos los que nacen siempre están muriendo" de "The Time Keeper" de Mitch Albom reflexiona sobre la inevitabilidad de la muerte que acompaña a la vida. Sugiere que desde el momento en que nacemos, comienza el proceso de envejecimiento y descomposición, sirviendo como un recordatorio de nuestra mortalidad. Esta perspectiva alienta a los lectores a apreciar la naturaleza fugaz de la existencia y el tiempo que tienen.