... Mientras el viento aullaba, y el mar saltó, y el barco gimió y se zambulló, y sin embargo, disparó firmemente su infierno rojo más y más en la negrura del mar y la noche, y con desprecio champó el hueso blanco en su boca, y viciosamente escupió a su alrededor en todos los lados; Luego, el Pequod apresurado, cargado de salvajes, cargado de fuego, y quemando un cadáver, y sumergiéndose en esa negrura de la oscuridad parecía la contraparte material del alma de su comandante monomaníaco.
(...as the wind howled on, and the sea leaped, and the ship groaned and dived, and yet steadfastedly shot her red hell further and further into the blackness of the sea and the night, and scornfully champed the white bone in her mouth, and viciously spat round her on all sides; then the rushing Pequod, freighted with savages, and laden with fire, and burning a corpse, and plunging into that blackness of darkness seemed the material counterpart of her monomaniac commander's soul.)
El pasaje representa vívidamente el viaje tumultuoso del Pequod, un barco ballenero, mientras lucha contra las feroces fuerzas de la naturaleza a su alrededor. El barco, personificado como una criatura feroz, lucha contra el viento aullante y las olas chocando, empujando más profundamente hacia el océano oscuro y misterioso. Esta imagen enfatiza no solo la lucha física del recipiente, sino que también insinúa la naturaleza más oscura y obsesiva de su comandante, el Capitán Ahab, cuya búsqueda implacable de un objetivo singular refleja el movimiento caótico del barco.
La descripción sirve como un reflejo del tormento interno de Ahab y la obsesión monomaníaca, ya que el barco parece encarnar su espíritu frenético. Las imágenes cargadas del fuego, la oscuridad y la muerte ilustran un descenso a la locura, representando la fijación de Ahab en venganza contra la gran ballena, Moby Dick. A través de esta poderosa representación, Melville destaca la conexión entre el peligroso viaje del barco y la tumultuosa psique de Ahab, creando una profunda interacción entre el hombre, la naturaleza y la obsesión.