En tiempos de profunda tristeza, a menudo se encuentra que el sentimentalismo no tiene lugar; En cambio, el peso del dolor se siente tan inmutable como las montañas. Estas emociones no invitan a la queja o argumento, sino más bien la aceptación de una dura realidad. El reconocimiento de la tristeza profunda exige un reconocimiento de su permanencia, y esta verdadera verdad da forma a cómo se navega por la vida.
En el trabajo de William S. Burroughs, "Queer", esta idea refleja la naturaleza a menudo inquietante de la desesperación existencial. Sugiere que una vez que enfrenta la profundidad de su tristeza, debe enfrentarla sin negación o adorno, lo que lleva a una comprensión más honesta de las experiencias de uno. Tales realizaciones pueden ser liberadoras y pesadas.