Incapaz de descifrar o comprender todo lo que era complicado o fuera de la caja, enfurecido con aquellos que consideraban serpientes dentro, los fundamentalistas se vieron obligados a imponer sus fórmulas rudimentarias también a la narrativa. Y así como los colores de la realidad perseguían, tratando de adaptarlo a su mundo en blanco y negro, ferozan, como sus antagonistas ideológicos, contra cualquier forma de interioridad en la narrativa, terminando persiguiendo precisamente las novelas sin contenido político. Como los de la muy peligrosa Jane Austen, por ejemplo.
(Unable to decipher or understand everything that was complicated or outside the box, infuriated with those who considered snakes within, the fundamentalists were forced to impose their rudimentary formulas also to the narrative. And just as the colors of reality persecuted, trying to adapt it to their world in black and white, they fierce - like their ideological antagonists - against any form of interiority in narrative, ending up persecuting precisely the novels without political content. Like those of the very dangerous Jane Austen, for example.)
En el texto, Azar Nafisi ilustra la lucha de los fundamentalistas que les resulta difícil comprender narraciones complejas que se desvían de su cosmovisión en blanco y negro. Su incapacidad para aceptar tonos de gris los lleva a hacer cumplir interpretaciones simplistas, especialmente dirigidas a obras que carecen de mensajes políticos abiertos. Esta reacción refleja un problema más amplio con intolerancia hacia la narración matizada, que consideran una amenaza para sus...