La cita de "The Magic Strings of Frankie Presto" de Mitch Albom refleja el viaje de la expresión artística en la música. Sugiere que, si bien algunas canciones pueden requerir múltiples intentos para acertarlos, llega un punto en que un artista debe aceptar que una canción está completa. El acto de intentar una y otra vez revela la lucha que enfrentan muchos músicos para perfeccionar su oficio.
Una vez que una canción alcanza su forma final, representa un momento de cierre para el artista. Ya no pueden manipularlo o cambiarlo, destacando la permanencia que viene con la finalización. Esto subraya la importancia de abrazar las imperfecciones en el proceso creativo al tiempo que reconoce la belleza de una pieza terminada.