¿Sabes cuánto tiempo llevó Dios destruir la Torre de Babel, amigos? Siete minutos. ¿Sabes cuánto tiempo tardó el Señor Dios para destruir a Babilonia y Nínive? Siete minutos. Hay más maldad en una cuadra en la ciudad de Nueva York que en una milla cuadrada en Nínive, y ¿cuánto tiempo crees que el Señor Dios de Sabboath llevará destruir la ciudad de Nueva York y Brooklyn y el Bronx? Siete segundos. Siete segundos.
(Do you know how long God took to destroy the Tower of Babel, folks? Seven minutes. Do you know how long the Lord God took to destroy Babylon and Nineveh? Seven minutes. There's more wickedness in one block in New York City than there was in a square mile in Nineveh, and how long do you think the Lord God of Sabboath will take to destroy New York City and Brooklyn and the Bronx? Seven seconds. Seven Seconds.)
La cita destaca la naturaleza rápida del juicio divino, enfatizando la idea de que Dios puede provocar la destrucción en meros momentos. Esto se ilustra en la afirmación de que Dios tardó solo siete minutos en destruir ciudades antiguas significativas como Babel, Babilonia y Nínive. El orador sugiere que el nivel de maldad presente en las ciudades contemporáneas, particularmente la ciudad de Nueva York, supera el de los lugares históricos conocidos...