Marlys es descrita como una mujer robusta de unos cincuenta años, caracterizada por sus llamativos rizos blancos que recuerdan al glaseado de vainilla. Su atuendo consiste en gafas sin montura, un vestido de cuadros rojos hecho por ella misma y unas prácticas Nike de caña baja, lo que sugiere una naturaleza con los pies en la tierra. Sus rasgos físicos incluyen nariz corta, tez pálida y una boca pequeña y rosada que a menudo refleja sus pensamientos contemplativos o de desaprobación.

Este retrato de Marlys enfatiza su individualidad y fuerza, destacando tanto su apariencia como su comportamiento. Los cuidadosos detalles de su descripción crean una imagen de alguien accesible y serio, lo que insinúa una personalidad reflexiva pero firme en sus opiniones.