La Constitución Americana es un documento fundamental diseñado por individuos altamente inteligentes, pero su practicidad se basa en la interpretación de aquellos que podrían no poseer el mismo nivel de información. Esto sugiere una dicotomía en la que la brillantez de sus creadores a veces puede verse eclipsada por la complejidad o simplicidad de sus intérpretes posteriores. Los críticos argumentan que la vaguedad de la constitución puede conducir a distorsiones de su intención original.
.Joseph J. Ellis, en su libro "Fundadores hermanos: la generación revolucionaria", enfatiza esta tensión entre el genio de los padres fundadores y el potencial de malentendido por parte de generaciones posteriores. La cita refleja una preocupación más amplia sobre cómo los marcos legales y políticos cruciales pueden aplicarse o malinterpretarse con el tiempo, configurando así la gobernanza de formas que pueden divergir de la visión original.