cita de libro - Citas bilingües que celebran la belleza del lenguaje y muestran expresiones significativas desde dos perspectivas únicas.

Cuando más lo necesitamos, es casi imposible vernos con compasión de la hendidura de una mente estrecha, todo tenso para la batalla.

Quizás uno de los remedios más difíciles de aceptar para nuestro dolor de convertirnos es que donde sea que estemos en nuestro camino, no importa cuán defectuoso o incompleto, es una floreciente en sí misma.

El ojo puede ver lo que tenemos en común o enfocarnos en lo que nos mantiene separados. Y el corazón puede sentir lo que se une a nosotros con todo o reproducir sus muchos cortes. Y la lengua puede alabar el viento o advertir contra la tormenta, puede alabar el mar o temer la inundación.

La vida interior de cualquier gran cosa será incomprensible para mí hasta que desarrolle y profundice una vida interior propia.

La sabiduría me dice que no soy nada. El amor me dice que soy todo. Y entre los dos fluye mi vida. -Nisargadatta maharaj

Intenté mucho complacer que nunca me di cuenta de que nadie está mirando.

La bondad es el antídoto para todo. Así como el agua se dispara, la bondad calma la forma en que nos quemamos de vez en cuando. Y bajo todas las formas en que quemamos y lastimamos, está la presencia suave y duradera con la que nacimos, esperando florecer en medio de cualquier problema.

Somos el escenario y todos los jugadores.

Así como una vid o un arbusto, no importa la frecuencia con la que se reduzca la luz que crece a la luz, el corazón humano, no importa la frecuencia con la que se corte, puede reafirmar su impulso al amor.

A menudo confundimos el viaje de la curación como uno que cubre una herida. Pero como las heridas necesitan aire y luz para tejer y sanar, nuestro dolor y dolor deben ser sacados a la luz para que podamos ser sanados por la vida.

Cuando nos curemos a nosotros mismos, sanamos el mundo. Porque como el cuerpo es tan saludable como sus células individuales, el mundo es tan saludable como sus almas individuales.

Viajar sin ser cambiado es ser un nómada. Cambiar sin viajar es ser un camaleón. Viajar y ser transformado por el viaje es ser un peregrino.

Dentro de las hojas jóvenes envueltas dentro de las hojas jóvenes: el sonido del agua. -Soseki Esta delicada observación de este poeta japonés está llena de la tranquila esperanza de que incrustado en nuestra naturaleza, incluso cuando comenzamos, es nuestro regalo ya desarrollado. Incrustado en la semilla está la flor. Incrustado en el útero está el niño completamente cultivado. Incrustado en el impulso de preocuparse es la paz del amor realizada. Incrustado en el borde del riesgo y el miedo es la autenticidad que hace que valga la pena vivir la vida.

Ubuntu-soy porque lo eres, eres porque yo soy ... -Un profunda forma de ser africana

Cuando nos sentimos mal sobre nosotros mismos, a menudo nos esforzamos en otras pieles en lugar de comprender y cuidar a los nuestros.

Lo sorprendente era que sus pequeñas manos delicadas se tocaban, sus dedos de mono se inclinaban entre sí. Estaba claro que era este pequeño toque sostenido el que les permitió dormir. Mientras se tocaron, pudieron soltar. Envidié su confianza y simplicidad. No hubo ninguna de las pretensiones humanas en la independencia. Claramente se necesitaban para experimentar la paz. Uno se agitó pero no se despertó, y el otro, mientras dormía, mantuvo los dedos conmovedores. Qué profundamente gratificante de la vida del tacto.

Robert con calma, como un sabio oriental, trató la situación como si fuera un koan, un acertijo para ingresar hasta que sus supuestos cambiaron.

Pero hoy eres precioso, raro y despierto. Nos lleva a una vida agradecida. Hace dudas inútil. Agradecido y despierto, pregunte qué necesita saber ahora. Di lo que sientes ahora. Ama lo que amas ahora.

Vivir es una conversación sin fin, un baile sin pasos, una canción sin palabras, una razón demasiado grande para cualquier mente.

Estos cuerpos son perecederos, pero el habitante en estos cuerpos es eterno. -Bhagavad-gita

Ahora, solo quiero regalar todo lo que tengo la suerte de conocer y desaparecer en la corriente.

Una mente estirada por una nueva experiencia nunca puede volver a sus viejas dimensiones. -Oliver Wendell Holmes

No hay mañana, solo una cadena de hoy. Aún

Ayúdame a resistir el impulso de disputar si las cosas son verdaderas o falsas, lo que es como argumentar si es de día o de noche. Siempre es uno u otro en algún lugar del mundo. Juntos, podemos penetrar una verdad más alta que, como el sol, siempre se transmite.

La verdad es que la vida nos romperá y nos quemará en algún momento del viaje. Esto no es pesimista o cínico, sino descriptivo de la geografía de estar vivo. Es parte de cómo el viaje nos transforma. Sin embargo, cuando estamos rotos o quemados por los eventos, nos sentimos traicionados por Dios. Cuando la gente nos rompe o quemamos, nos sentimos traicionados por otras almas.

Como Martin Luther King Jr. profetizó, creo que lo que los egocéntricos han derribado, el otro centrado se acumulará.

Del mismo modo, cada perturbación, ya sea resuelta o no, está haciendo espacio para un compromiso interno. A medida que una pala cava y desplaza la tierra, de una manera que debe parecer violenta a la tierra, se revela un espacio interior para la excavación. De esta manera, cuando la experiencia nos abre, a menudo se siente violento y el impulso, naturalmente, es rellenar esa apertura, para hacerlo como era. Pero cada experiencia excava una profundidad, lo que revela que su sabiduría una vez se abrió al aire.

Respira como una hoja caída y no pienses en nada. Solo respira y deja que tu corazón y tu mente sean llevados, aunque brevemente, por el espíritu que no puedes ver.

Deja ir el arroz en un mundo que vive como un puño de misericordia no es más que despertar con las manos abiertas. Mucho más puede pasar con las manos abiertas. De hecho, cerrar y mantener obstinadamente nuestro agarre a menudo es lo que nos mantiene atrapados, aunque queremos culpar a todo y a todos los demás, especialmente a lo que estamos aferrando.

Aprendí que todo está justo donde estamos. No importa nuestro dolor o angustia, toda la vida está en cualquier momento en el que nos despertemos. Podía ver claramente y sentir cómo nuestro miedo a la muerte nos hace correr, aunque no hay ningún lugar a donde ir. Sin embargo, misteriosamente, aprendí que hay un anillo de paz en el centro de cada miedo, si solo podemos llegar a ella. Cada vez que me ducho ahora, trato de recordar que no podemos vivir completamente hasta que podamos aceptar primero nuestra eventual muerte. De lo contrario, siempre estaremos corriendo o corriendo. Solo cuando podamos aceptar que somos invitados frágiles en esta tierra, solo entonces estaremos en casa donde sea que estemos.